El fin de semana pasado, aprovechando que era el último fin de semana del verano, decidí hacer una excursión a la montaña en tren...
En el vagón íbamos muy pocos pasajeros y yo me junté con otros dos excursionistas que también iban a la montaña.
A la hora de la comida yo saqué mis provisiones, que eran unas deliciosas empanadas que había cocinado la noche de antes, cinco en total.
Uno de los pasajeros sacó sus provisiones, que también eran empanadas. Él llevaba tres.
Deliciosas mini-empanadas |
Como el viaje estaba siendo muy agradable y la conversación muy amena decidimos compartir la comida y ofrecer empanada al tercer excursionista.
Como yo había puesto cinco empanadas reclamé cinco monedas, pero el excursionista que puso tres empanadas comentó que, ya que todo se había repartido equitativamente, se hiciera lo mismo con las monedas.
Para solucionarlo decidimos llamar al revisor para consultarle cómo podíamos repartir las monedas de la manera más justa.
¿Qué pensáis que nos dijo? ¿Cuántas monedas recibí?
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